BENITO, Juan José - El resurgir de las campanas de Vinaròs
El resurgir de las campanas de Vinaròs
Momento de la bendición y el bautizo de las nuevas campanas
IV centenario de la llegada de la reliquia de San SebastiánTras el acto de fundición del sábado, Vinaròs procedió ayer a la retirada del molde de las dos nuevas campanas que se instalarán en la torre del campanario de la arciprestal. Además, fueron bendecidas y bautizadas por el arcipreste en medio de una gran expectación.
Las tres nuevas campanas de Vinaròs fueron bautizadas ayer en un multitudinario acto celebrado en la plaza Parroquial, junto el mismo lugar donde el sábado fueron fundidas dos de ellas. A las diez y media de la mañana los técnicos de la fundición francesa Paccard retiraron los moldes exteriores de hierro, mientras que a la una se retiraba el molde de tierra compactada interior, saliendo a relucir las dos campanas de 450 y 275 kilos.
El alcalde, Jordi Romeu, fue el encargado de dar los primeros martillazos para romper el molde interno que dejaba al descubierto la campana Sebastián, la más pequeña y que sufraga el ayuntamiento. El arcipreste de Vinaròs, Emili Vinaixa, hizo lo propio para dejar al descubierto la campana Misericordia.
Los cientos de vinarocenses congregados conocieron en esos instantes como sonarán ambas campanas por los golpes de los martillos para eliminar el molde. Los técnicos de la fundición francesa comprobaron que ambas campanas estuvieran en perfecto estado y, seguidamente, empezaron a pulirlas para, pasada la media tarde, colocarlas frente la iglesia arciprestal, donde a las ocho fueron bautizadas junto la campana de 1.300 kilos que se había fundido semanas atrás en la factoría de Paccard en Francia.
Las campanas, rodeadas de flores y con incienso colocado bajo sus bases, fueron bendecidas y bautizadas por Vinaixa en medio de una gran expectación. Un acto donde se comprobó la sonoridad de las nuevas campanas, que el viernes se elevarán hasta la sala de campanas de la torre campanario.
Romeu y Vinaixa mostraban su satisfacción por el éxito del primer gran acto programado con motivo del IV centenario de la llegada de la reliquia de San Sebastián a la ciudad. Vinaixa se mostraba emocionado tras romper el monde de la campana que lleva el nombre de la patrona, calificando este acto de fundición de la campana como de histórico. Por su parte, Romeu calificaba de espectacular el momento de la fundición y estaba satisfecho de cómo había salido.
También estaba presente el presidente de Caixa Vinaròs, Manuel Molinos, entidad que ha sufragada la campana El Salvador de 1.300 kilos, que destacaba la espectacularidad del momento de la fundición como lo emotivo del momento en que se descubrían las campanas tras retirar los respectivos moldes.
