Las dos campanas de la iglesia de Alcalalí fueron colocadas ayer en su campanario y ahora se
marcha a los talleres la de ‘San Cosme’, de 1450
Pablo Aranda prueba la ‘grossa’
Un día de gozo y alegría. Eso es lo que vivieron ayer los vecinos del Alcalalí. Al fin, después de meses de espera, ayer se colocaron en la torre de la Iglesia de la Natividad de Alcalalí las campanas que estaban siendo expuestas al público en el interior del templo
tras el proceso de restauración que llevó a cabo la Conselleria de Cultura y que finalizó el pasado 11 de febrero.
Sobre las 10 horas se iniciaron los trabajos para poner en su lugar a San Vito y San Jaume , como así se llaman las campanas.
Para ello, la empresa encargada de todo este procedimiento se tuvo que valer de una grúa para conseguir alcanzar la parte más alta de la Iglesia de la Natividad.
Fuerte viento
El sacerdote de Alcalalí, Pablo Aranda, indicó que la subida de las dos campanas se había producido sin ningún contratiempo “a pesar de las fuertes rachas de viento que se notan con más fuerza en el campanario” y que hicieron peligrar el transcurso de este acto.
Aranda subrayó que “los técnicos se han encargado de dejarlas en su lugar natural sobre unas bases colocadas con este fin y después han procedido al cableado eléctrico y la colocación de los motores junto con los electro martillos”.
Respecto a las fechas que se barajan para que San Vito y San Jaume empiecen a repicar con fuerza, Pablo Aranda ha indicado que “posiblemente los toques de misa empiecen a funcionar hoy mismo”.
Para el volteo de campanas, Aranda apunta que “se ha escogido el Domingo de Ramos” para que sea la mañana en que después de años sin hacer repicar el sonido original, los vecinos de Alcalalí vuelvan a escuchar la melodía de dos elementos fundamentales
del patrimonio histórico de esta localidad de la Vall del Pop, pues han marcado las celebraciones religiosas y festivas de este encantador municipio.
El empeño mostrado por este sacerdote destinado a la Vall del Pop por la Diócesis de Valencia hace un año, empieza a tener sus frutos.
Desde que fue trasladado a Alcalalí, Pablo Aranda explicó que uno de sus objetivos era el de “recuperar los sonidos originales” de las piezas y, de este modo, regalarle a Alcalalí unos sonidos con más de 600 años de historia.
Memoria técnica
En la memoria técnica elaborada por Manclús, mercantil de la ciudad del Turia encargada de la restauración, se indica que se han cambiado los yugos de las campanas puesto que llevaban colocados más de 25 años por lo que suponía un peligro “pudiendo romperse y caer la campana al suelo de la plaza, con el riesgo que ello entrañaba”.
Ahora, el siguiente paso del proceso de restauración, afecta a la campana de San Cosme y San Damián , la mediana en tamaño.
Pablo Aranda ha narrado que ya ha sido trasladada esta campana al taller de restauración y en estos momentos los técnicos de la Conselleria de Cultura están estudiando cómo restaurar la campana más antigua de la torre de Alcalalí.
En concreto se trata de una pieza gótica que data del año 1450. Aranda confía en que la Generalitat tenga a bien recuperar esta campana y lograr el 100% de su compromiso con los vecinos.
Ayer, día soleado, pero frío y ventoso, los vecinos no quisieron perderse la ocasión de ver cómo regresaban las campanas a su casa.
A pesar de las dificultades meteorológicas, la colocación de las campanas transcurrió sin incidentes, tras más de dos horas de trabajo de las grúas y los operarios de la empresa encargada de la instalación.
A partir de hoy Alcalalí volverá a escuchar las campanas de la parroquia de la Natividad, con un sonido más brillante y auténtico que el que desprendían durante los últimos años.
