como toda búsqueda de un inicio, gárgolas es desapacible. nos sitúa a la intemperie. sabe a lo original.
gárgolas es piedra, pero piedra que canta tanto como el cantero y los ecos que despierta. es canto, preñado de memoria. como el resonar de las campanas.
gárgolas y campanas están sembradas de recuerdos profundos. ambos son instrumentos protectores de las partes adverse. y ambos, en su lejanía y esoterismo, nos conmueven. resuenan en nuestras salvajes fibras de homo-non-tan-sapiens.
cada gárgola, como cada campana, encierra un mito. cada mito un miedo. cada miedo una pregunta sin contestar.
una vez más el arte es acicate para un resonador vivir en consonancia (en ethos) con cuanto de precario y vivo hay en el universo.
© BARBER, Llorenç (1997) © Campaners de la Catedral de València (2024) campaners@hotmail.com Actualización: 29-03-2024 |